Entre los locales inspeccionados, se encontró que cuatro no contaban con los permisos municipales de funcionamiento. En estos establecimientos, los mostradores se encontraban repletos de una gran variedad de carne desprotegida, expuesta directamente al ambiente y propensa a la rápida proliferación de bacterias y patógenos. Esto incumple la cadena de frío, necesaria para mantener la carne a temperaturas adecuadas,preservando su frescura y seguridad.
La carne retenida, y que será destruida al no ser apta para el consumo humano, incluye: 20 pollos, 14 patas de res, 8 costillares traídos de contrabando a través de la frontera y un tanque lleno de víceras que era exhibido en medio de la calle.
También se levantó cinco actas de sanción por irregularidades relacionadas con el origen de la carne, pues no contaban con los certificados de faenamiento y transporte, documentos que aseguran la calidad de la carne.
Según el artículo 1947 del Código Municipal, las personas que no cuenten con la Licencia Única de Actividades Económicas (Luae) para realizar la venta de carne en el Distrito Metropolitano podría enfrentar una multa de 4.140 hasta 6.900 dólares.
En estos primeros seis meses del 2024, se han iniciado 217 procedimientos de sanción y clausurado 28 carnicerías duplicando las cifras totales del anterior año (2023), donde se habían iniciado 127 procedimientos y 11 clausuras.
Los últimos controles han incentivado la regularización de los comerciantes para ejercer esta actividad económica y cuidar de las condiciones sanitarias de su negocio en beneficio de las y los quiteños.