Este operativo de la Agencia Metropolitana de Control (AMC) se realizó en coordinación con la Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (ACESS), la Policía Nacional y el Centro de Salud del sector.
La AMC inició el procedimiento de sanción por la falta de la Licencia Única para el Ejercicio de las Actividades Económicas (LUAE), lo cual podría resultar en una multa de entre USD 2.300 y USD 3.680.
Los centros de rehabilitación deben tener la autorización respectiva para su funcionamiento y cumplir las normativas de seguridad y salud. Los permisos garantizan que las instalaciones sean adecuadas para los pacientes, proporcionen un entorno adecuado para su recuperación y no pongan en riesgo su bienestar.
La clausura de este establecimiento confirma el compromiso en proteger a las personas que buscan ayuda en estos centros y también garantizar que operen legalmente y en condiciones óptimas para ofrecer un tratamiento seguro y efectivo.
Con control, Quito renace.