Esto lo mencionó en el marco de su comparecencia ante pleno del Concejo, por las acciones de control a una constructora de dos edificios que no contaba con los permisos municipales, ubicados en el sector La Carolina, al norte de la capital.
En este caso puntual, la constructora, además de pagar una multa de más de 40 mil dólares, se le impuso la prohibición de enajenar los bienes inmuebles. Esto quiere decir que no tiene permitido comercializar sus departamentos hasta obtener los permisos correspondientes.
El alcalde de Quito, Pabel Muñoz, dispuso a la AMC implementar un sistema donde los ciudadanos que deseen adquirir un departamento en la capital puedan revisar si el edificio cumplió con los parámetros y permisos municipales durante su construcción.
Además, el alcalde de Quito recordó que “se equilibró la relación contractual con las dos entidades colaboradoras. Cuando llegamos a la administración, recibíamos como Municipio apenas el 0.001% por la utilidad de los permisos. Les exigimos que lo mínimo que se aceptaría era el 10% de los ingresos”.
Desde la gestión del alcalde Muñoz, la nueva suscripción del convenio con las dos entidades colaboradoras, tanto del Colegio de Arquitectos del Ecuador y Desinteca, el Municipio de Quito recibe el 10% del total de ingresos por la prestación de servicios de estas entidades privadas.
Las entidades colaboradoras se encargan de emitir certificados que validen los planos de arquitecturas e ingenierías, revisando el cumplimiento de las normas administrativas y reglas técnicas de construcciones y edificaciones, esto como un paso previo para obtener la Licencia Metropolitana Urbanística (LMU).
Mediante la LMU, el municipio autoriza el inicio de un proceso constructivo. Quien edifique sin la licencia correspondiente, incumplir o exceder la misma, será sancionado con una multa que va desde el 10% de un salario básico hasta 50 salarios básicos.